Adelgazar durante el embarazo es algo que puede ocurrir. Cuando descubres que esperas un bebé, a la alegría inicial, se suma una preocupación por el peso. El sentido común nos dice que debemos comenzar a ganarlo, al fin y al cabo, en nuestro interior está creciendo una personita que debería incrementar nuestro registro en la báscula, pero no siempre es así. Aunque lo normal es ir ganando kilos a medida que el embarazo va avanzando, existe la posibilidad de que, sobre todo, durante los tres primeros meses de gestación lleguemos a perder peso.

Durante las primeras semanas de embarazo, es habitual que las mujeres padezcan náuseas y malestar que provoquen que tengan pocas ganas de comer y, además, el aumento de nuestro metabolismo hace que el cuerpo consuma más calorías. Todo esto puede conllevar una ligera pérdida de peso que debemos vigilar.

Esto no significa que durante el embarazo tengamos que dejar de hacer nuestra vida, simplemente que debemos hacer ciertas actividades con moderación. Por ejemplo, si eres una persona a la que le gusta hacer ejercicio, aquí tienes los deportes recomendados durante el embarazo.

¿Por qué adelgazo en el embarazo?

embarazada pesándose mostrando tripa
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Si estamos hablando del primer trimestre, aunque este periodo se puede alargar en el tiempo, hay varios motivos por los que podemos perder peso durante este periodo:

  • Más del 50 % de las mujeres embarazadas tienen náuseas y vómitos durante el primer trimestre por lo que es posible que durante ese tiempo el número de calorías que el cuerpo asimila sea menor del que correspondería normalmente. Te recomendamos echar un vistazo a nuestro artículo "Remedios caseros para 6 molestias del embarazo".
  • Los cambios hormonales que se producen durante esta primera parte del embarazo pueden provocar pérdida del apetito y, en consecuencia, la disminución de la ingesta de alimentos puede traducirse en pérdida de peso.
  • El cuerpo está trabajando a un ritmo para él desconocido en la creación del bebé, esto supone un esfuerzo adicional que también puede traducirse en pérdida de kilos.

En resumen, si durante el primer trimestre observamos una reducción de kilos, no debemos preocuparnos en exceso porque es bastante habitual aunque, si la pérdida de peso es excesiva, consulta a tu médico. Además, hay que tener en cuenta que la genética juega un papel importante, pregunta a tu madre y/o abuela sobre cómo les fue a ellas ya que, si ellas adelgazaron en este periodo, puede darnos una pista sobre cómo nos irá en nuestro embarazo. Pregúntales cómo les fue a ellas y a qué ritmo les crecía a ellas la tripita, así tendrás una referencia. Y no te pierdas estas curiosidades sobre la tripa de embarazada.

Qué debo vigilar si pierdo peso

una chica embarazada, con pantalón corto y camiseta de tirantes, se pesa en unas báscula en su baño
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Hay dos aspectos que debemos controlar si perdemos peso en el primer trimestre. La deshidratación y la desnutrición pueden suponer un peligro que hay que atajar. En todo caso, es un buen momento para comenzar una dieta equilibrada para asegurarnos de incorporar a nuestro organismo todos los macronutrientes (proteínas, hidratos de carbono, grasas), minerales y vitaminas que el cuerpo va a necesitar para nosotros y para el bebé que crece en nuestro interior. Es recomendable contar con nuestro ginecólogo y, si es posible, nuestro nutricionista, ya que su acción coordinada nos encaminará en la buena dirección.

Recuerda que durante el embarazo hay que controlar bastante nuestra alimentación, ya que hay algunos productos habituales en nuestra dieta que tendremos que dejar aparcados durante nueve meses, a la vez que, a lo mejor, tienes que aumentar la ingesta de otros para evitar posibles déficits de hierro u otras sustancias necesarias para el cuerpo. Aquí tienes una guía completa sobre alimentación en el embarazo: todo lo que no debes comer.

Lo normal es que durante el segundo y tercer trimestre vayamos recuperando lo perdido en la primera etapa y empecemos a ganar peso a medida que el bebé va desarrollándose. Si esto no ocurriera y la pérdida de peso se mantiene más allá del primer trimestre, debemos consultar con los especialistas para evitar complicaciones. Si adelgazamos en las últimas semanas de gestación, es importante consultarlo, cuanto antes, con el equipo médico, antes de que se pueda complicar el momento del parto (puede resultar de utilidad este artículo "La recta final del embarazo: prepárate semana a semana"). Es importante saber que no todas las contracciones que sientes son las del momento del nacimiento, así que aprende a distinguir las contracciones de parto.

¿Cuánto se suele engordar en el embarazo?

Lo primero que se debe tener claro es que tanto la obesidad como la delgadez extrema provocan embarazos de riesgo, por eso, vigilar el peso es fundamental durante el embarazo. Cada mujer vive un embarazo distinto y son muchos los factores que intervienen en el peso que la mujer gana durante la gestación, pero lo habitual es subir entre 8 y 14 kilos durante todo el embarazo, dependiendo de si empezamos el embarazo pasadas de peso o por debajo de nuestro peso habitual y de nuestra complexión natural.

Otro factor que influye en el aumento de peso es la tendencia a retener líquidos: si la mujer tiene tendencia a retener líquidos aumentará más de peso, y lo mismo sucede si va a tener mellizos o trillizos. Para evitar la retención, puedes echar un vistazo a nuestro artículo "Los mejores consejos para eliminar la retención de líquidos".

¿Y cómo se reparte ese aumento de peso a lo largo del embarazo? Pues generalmente la ganancia de peso suele ser progresiva: durante el primer trimestre lo habitual es ganar un kilo o dos. A partir de ese momento, lo más frecuente es un kilo y medio por mes, aproximadamente.

Lo importante es prestar atención a la báscula durante el proceso y seguir las indicaciones de nuestro ginecólogo. Aprende, adáptate, lee, para estar preparada para el momento en el que se caiga el el tapón mucoso, que es la primera señal de que ya llega nuestro bebé.